[Nfbespanol-talk] REPOLLO, PAN Y MASA

[Frida Aizenman]

Braille Monitor

Volumen 34, Número 10

Noviembre, 1991

Barbara Pierce, Redactora

REPOLLO, PAN Y MASA
por Marc Maurer

Traducido por Frida Aizenman


El poder de una nación se puede medir por su capacidad de persuasión moral, por sus logros intelectuales, por los artefactos culturales que resultan de los esfuerzos de su gente, por su poderío militar, o por la magnificencia de su arquitectura. La mayoría de estas pruebas son una medida de lo que el país ya ha hecho, no de lo que hará. Hay, sin embargo, una norma menos conocida y más penetrante para indicar la posición o el poder de una nación. Esta es la buena voluntad de los demás a aceptar su dinero. Históricamente, dentro de una región del mundo, la moneda de una nación predomina. El denario Romano viajó con el ejército Romano durante la conquista de Europa y Oriente Medio. La influencia de esta moneda Romana era tan grande que seguía siendo una unidad estándar de dinero en algunas partes de Europa desde la época del Imperio Romano hasta la Revolución Francesa en el siglo 18.
En la segunda mitad del siglo 15 y durante gran parte del 16º, España construyó y mantuvo la fuerza naval más poderosa en el mundo occidental. Exploradores españoles enviaron barcos del tesoro a la madre patria de América Central y América del Sur. Debido a la gran cantidad de oro y plata que entró en el sistema económico europeo, hubo un período de inflación mayor. Sin embargo, el predominio de España en el mundo se hizo sentir en las economías de los países Europeos. El negocio del continente se llevó a cabo en gran parte con dinero Español.
En 1588, una flota Inglésa derrotó a la armada Española. Casi al mismo tiempo, los exploradores Ingléses circunnavegaron el globo. Para el siglo 19, hubo colonias Inglesas en todas las partes del mundo. Se decía que nunca se ponía el sol en la bandera Británica. El sistema monetario del mundo también había cambiado. La libra esterlina se convirtió en la moneda internacional. Londres se convirtió en el centro bancario (y, hasta cierto punto, el centro de poder) del mundo.
En la primera mitad del siglo 20, la moneda más fácilmente aceptada internacionalmente volvió a cambiar. El presidente Theodore Roosevelt convocó una conferencia cumbre para discutir las normas monetarias y estabilizar el comercio mundial. El dólar se convirtió en la unidad predominante de intercambio internacional. Cada vez que el dinero de un país era objeto de valoración, el estándar de medida era el dólar de los Estados Unidos. Al mismo tiempo, el poder militar de los Estados Unidos era considerado como insuperable, y la mercancía intangible llamada "ingenio yankee" era envidiada y admirada.
Si un país ha de ser una potencia mundial dominante, su dinero tendrá preeminencia en el comercio mundial. Se trata de si la nación hace el dinero importante, o si el dinero hace a la nación importante, pero es inmaterial. Es cierto que ningún sistema monetario importante ha sido establecido, excepto en relación con una nación poderosa. No es que la preeminencia en los asuntos económicos es necesariamente una condición previa para que un país se convierta en una potencia mundial. Sin embargo, una nación que tiene la preeminencia en su moneda, inevitablemente, será una de las más poderosas del mundo.
Hasta hace poco, habían quienes se preguntaban si la Unión Soviética conquistaría el mundo. Ahora parece que este no será el caso. Sin embargo, si debe haber una amenaza de los soviéticos en el futuro, es poco probable que sea determinante a menos que una parte importante del comercio mundial comience a ser tramitado en rublos.
Una de las monedas importantes en el mundo de hoy es el yen japonés. Durante gran parte de este siglo, Japón ha sido un participante importante en los asuntos mundiales. En el año 1900, el poder naval de Japón derrotó a Rusia. Durante los últimos veinticinco años, los japoneses han capturado cada vez más importantes segmentos de los mercados Estadounidenses y Europeos. Cabe preguntarse si el poder militar de Japón no pudo lograr la victoria en la Segunda Guerra Mundial porque los japoneses no habían alcanzado la fuerza económica suficiente en ese momento. Tal vez más atención a las cuestiones monetarias habrían ganado más batallas por Japón.
Tal especulación se da mayor verosimilitud si tenemos en cuenta que una de las armas utilizadas en la guerra es, por lo general, el dinero falso. La teoría es que, si una cantidad considerable de dinero bien hecho falsificado se distribuye en el país enemigo, se producirá la interrupción del sistema económico debido al temor de aceptar la moneda de ese país.
Nosotros, en la Federación Nacional de Ciegos, dedicamos una gran cantidad de tiempo y esfuerzo en la recaudación de fondos. Esta es una de nuestras actividades más importantes, no sólo por el dinero que generamos (a pesar de que es de enorme importancia), sino que también porque la recaudación de fondos requiere que nosotros, como personas ciegas, adoptemos un papél esencial para el éxito. La transformación de un sector de la sociedad de una clase a otra exige que muchos miembros de la clase lleven a cabo tareas que tradicionalmente no han realizado. Para la obtención de fondos, nosotros, como personas ciegas, debemos organizar nuestro tiempo, ofrecer un servicio a los demás, considerar los problemas de la administración, resolver las dificultades de transporte, reconocer la necesidad de establecer sistemas de contabilidad y seguridad, y hacer frente a todos los demás detalles incidentales a la operación de una estructura compleja de rendimiento diario y esfuerzo coordinado. Ya sea que lo digan o no (y, de hecho, si lo saben conscientemente), la mayoría de las personas comienzan con la idea subyacente de que este nivel de actividad es demasiado sofisticado para los ciegos, y por desgracia, muchos de nosotros que somos ciegos (al menos inconscientemente y por nuestro comportamiento) estámos de acuerdo. Nosotros, de la Federación Nacional de Ciegos, rechazamos esta idea, no sólo en detalles, sino que también como un principio general de la filosofía y el compromiso. No se equivoquen. El dinero que recibimos mediante la recaudación de fondos es importante, pero aún más valioso puede ser el establecimiento y la continuación de los patrones de conducta diaria necesarios por las exigencias de la financiación de nuestro movimiento , los patrones de auto-respeto, la responsabilidad de primera clase como seres humanos.
La moraleja de la historia es clara: Crear un programa, recaudar fondos, creer en nosotros mismos y en nuestra causa, y comportarnos como la gente de éxito que somos y en la que nos convertimos cada vez más. Vamos a hacer estas cosas, e inevitablemente seremos preeminentes en los asuntos relativos a los ciegos. Este mensaje no está dirigido sólo a los líderes estatales y a los líderes de los capítulos. Está dirigido a todos nosotros, desde el más nuevo miembro, al presidente nacional. Encuentren una manera de reclutar Asociados; únase al Programa de Contribución Preautorizada, Pack Plan; recaude dinero para comprar pólizas de Seguro Diferido de Dar, DIG, para sí mismo y como un proyecto de capítulo; venda dulces o galletas (la tarea no es demasiado humilde), busque donativos de empresas e individuos; y encuentre maneras imaginativas de atraer contribuciones. Estas actividades serán útiles para la organización, ya que ampliarán nuestra base económica, y serán al menos tan importantes para ustedes como para mí (y también para la organización entera), porque en el proceso de creación, vamos a dirigirnos más cerca de nuestro objetivo final de estado de primera clase y miembro de pleno derecho en la sociedad. Día a día, el federacionista promedio es cada vez más seguro de sí mismo, confía en sí, más eficaz y exitoso. https://nfb.org/images/nfb/publications/bm/bm91/brlm9111.htm

 
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