[NFBEspanol-Talk] Lenguaje, Acción y Destino, la Experiencia Vivida del Movimiento Organizado de los Ciegos

Frida Aizenman nfbfrida at gmail.com
Wed Dec 29 22:27:40 UTC 2021


BRAILLE MONITOR

Tomo 63, Número 8

Agosto/Septiembre de 2020

Gary Wunder, Redactor

Lenguaje, Acción y Destino

La Experiencia Vivida del Movimiento Organizado de los Ciegos

Un Discurso Pronunciado por

Mark A. Riccobono, Presidente de la Federación Nacional de Ciegos

En el Banquete de la Convención Anual

De la Federación Nacional de Ciegos

En Línea (Baltimore, Maryland)

18 de Julio de 2020

Esta noche nos conectamos a través de las palabras. Una palabra es un 
solo, distinto,

elemento significativo del habla o la escritura. Cuando se usa sola o en 
abundancia,

las palabras forman la expresión de ideas y emociones. Ya sean habladas 
o escritas,

las palabras crean vibraciones que influyen en la propia realidad que 
nos rodea.

Esas vibraciones transmiten ideas, evocan emociones, influyen en el 
pensamiento

como patrones y fomentan la acción. Las palabras son, por tanto, la conexión

entre pensamiento y acción. Las cualidades vibratorias transmitidas a través

de palabras dependen de su combinación, su familiaridad y los medios de

entrega. La influencia de las palabras se amplifica o disminuye en 
función de la

acción o inacción que resulta.

Con el tiempo, pues, el significado de las palabras cambia y

gana poder de las creencias subyacentes.

El poeta inglés, Lord Byron escribió: "Las palabras son cosas, y una 
pequeña gota

de tinta, cayendo como rocío, sobre un pensamiento, produce lo que hace

que miles, quizás millones, piensen". La escritora y empresaria Ingrid

Bengis reflexionó y dijo,

"Para mí, las palabras son una forma de acción, capaz de

influir en el cambio. Su articulación representa una completa, vivida 
experiencia."

El poeta Persa del siglo XIII, Rumi, dijo una vez:

"Aumenta

tus palabras, no tu voz. Es la lluvia la que hace crecer las flores, no 
los truenos".

La Humanitaria Madre Teresa expresó que "las palabras amables pueden ser 
breves y fáciles

de hablar, pero sus ecos son realmente infinitos".

Mientras redactaba la

Declaración de la Independencia,

Benjamín Franklin observó que "Las palabras pueden

mostrar el ingenio de un hombre, pero las acciones su significado".

Hace ocho décadas, la primera convención de la Federación Nacional de

Ciegos se llevó a cabo en Wilkes-Barre, Pennsylvania.

En el banquete de esa

convención constitucional, el primer presidente de la Federación, el 
Doctor Jacobus

tenBroek, se dirigió a una asamblea relativamente pequeña. Cerró sus

comentarios con estas palabras simples pero poderosas.

"Es necesario que

los ciegos organizen por sí mismos sus ideas en base nacional, de modo que

Los hombres ciegos de toda la nación puedan vivir con comodidad física, 
dignidad social y

respeto espiritual por sí mismos". Si bien, hoy elegimos palabras 
diferentes, la sociedad

a nuestro alrededor está cambiando a un ritmo acelerado, y nuestro 
movimiento es

exponencialmente más complejo. La creencia central compartida por el 
Doctor tenBroek casi

Hace ochenta años sigue siendo la motivación para unirnos en

este banquete, que es el valor de la acción autodirigida de los ciegos.

Nos reunimos esta noche de una manera que altera el familiar

patrón, pero con el mismo amor, esperanza y determinación que siempre 
nos llamó a unirnos. Independientemente de las incógnitas que nos esperan,

llegamos al final de nuestra octava década con la certeza de que hemos

sostenido un movimiento que se erige como la fuerza más importante para los

ciegos en cualquier parte del mundo. Nos reunimos para renovar nuestro 
compromiso con nuestro

movimiento, para sentir el latido del corazón de nuestra organización, y 
para reunir la

fuerza necesaria para construir nuestro futuro. Somos los ciegos 
conectados desde

cada rincón de esta gran nación.

Somos ciegos de diferentes

antecedentes, perspectivas e interseccionalidades. Somos personas ciegas que

reconocemos el poder de la acción unificada y la energía concentrada. 
Somos personas ciegas que se benefician de ocho décadas de arduo trabajo 
y sacrificio de

generaciones difuntas de nuestro movimiento. Somos personas ciegas 
comprometidas con el

valor de retribución, a las oportunidades que surgen de crear

juntos, a la fortaleza encontrada en la acogida de nuevos miembros, y a la

urgencia de resistir todos los esfuerzos que amenacen nuestro progreso. 
Somos la

Federación Nacional de Ciegos.

A Mahatma Gandhi se le atribuye la observación de que:

"Tus creencias se vuelven

tus pensamientos.

Tus pensamientos se vuelven tus palabras.

Tus palabras se vuelven tu

comportamiento.

Tus acciones se convierten en tus hábitos.

Tus hábitos se convierten en tus valores.

Tus valores se convierten en tu destino".

En la Federación Nacional de Ciegos, hemos desarrollado un distintivo

patrón de creencias sobre la ceguera basado en nuestra auténtica 
experiencia vivida

por ser ciegos.

Nos referimos a este patrón de creencias como la filosofía de la Federación.

A medida que ponemos la filosofía en acción, agregamos nuevas 
perspectivas diversas que

influye en la sociedad que nos rodea, y nuestra comprensión se vuelve 
aún más

significativa. Nuestra filosofía se ve reforzada cuando alineamos 
nuestras palabras,

y nuestras acciones deben ser consistentes con nuestro patrón de creencias.

Constantemente encontramos que organizarnos a nosotros mismos y a 
nuestras ideas, como lo hemos hecho

al utilizar la filosofía de la Federación, es el medio más eficaz para 
que podamos hacer

progreso constante hacia nuestro objetivo de integrar a los ciegos en la 
sociedad en

términos de igualdad.

En contraste, a veces, escuchamos a administradores, consejeros,

maestros y otras personas que trabajan en el campo de la ceguera que

no se adhieren a una filosofía sobre la ceguera. Nos dicen que prefieren

no "elegir un bando", sino "elegir, y elegir entre muchas

fuentes." ¿Qué quieren decir cuando usan estas palabras? La filosofía de

La Federación Nacional de Ciegos ha sido formada, durante ochenta años, por

la experiencia vivida de cientos de miles de diversas personas ciegas.

Para ser claros, cuando decimos ciego (una palabra que creemos que tiene 
poder), nos referimos a una

definición funcional que incluye a individuos con diversos grados de

ceguera. Cuando un profesional de la ceguera dice que no puede adoptar la

Filosofía de la Federación, en realidad está rechazando un entendimiento 
compartido

arraigado en la experiencia vivida de las personas ciegas.

Estos profesionales tienen un

conjunto de creencias centradas, no en la experiencia de los ciegos, 
sino más bien, en una

creencia de que la experiencia de los que no son ciegos es normal, y que 
el elemento esencial

en esa normalidad es la vista. Esta es la filosofía centrada en la 
vista. Esa filosofía subyace frecuentemente en las palabras y acciones de

muchas personas no ciegas, que no pueden tener la experiencia vivida de ser

ciegos, así como los ciegos que han interiorizado el mito de que

La vista es un requisito para el éxito.

Podemos comprender las creencias subyacentes de las personas por

las palabras que usan. El otoño pasado, Pam Allen, primera 
vicepresidente de la Federación Nacional de Ciegos, estuvo en una gran 
reunión de líderes en el

campo de la ceguera. Durante una sesión sobre la promoción de publicidad 
y diseño distintivo de agencias para

ciegos, el facilitador hizo una pregunta seria: "¿Deberíamos seguir usando

la palabra C?" El tono de la pregunta implicaba que ciego es una 
grosería. Como directora ejecutiva del centro para ciegos, Louisiana 
Center for the Blind, Pam fue

la única persona ciega en la sala que supervisó una agencia dirigida por 
una junta

de personas ciegas, ofreciendo servicios basados en la filosofía de la 
Federación. Cuando nadie más habló, Pam explicó con confianza que el uso

de la palabra "ciego" no es simplemente apropiada, es esencial,

reflejando la creencia de que es respetable vivir y competir en términos

de igualdad como ciegos. Sin embargo, se encontró con una fuerte resistencia

y poco apoyo de la multitud reunida de administradores de agencias.

Esta

no fue una discusión filosófica para explorar el valor de la palabra "ciego"

o cambiar su significado entre el público en general. Esta fue una discusión

sobre cómo comercializar eficazmente las agencias que atienden a los 
ciegos y mejoran su promoción de publicidad y diseño distintivo 
excluyendo la palabra C. Si Pam no huviera estado en esa sala, o no 
huviera hablado, la multitud reunida habría afirmado una vez más su 
creencia de que

la vista debe ser avanzada mientras que se debe evitar la ceguera.

Por el contrario, el programa de la Biblioteca del Congreso para 
proporcionar acceso

a materiales de lectura para ciegos ha considerado recientemente cambios 
operativos

resultantes de la ratificación por los Estados Unidos del Tratado de 
Marrakech.

Se estaba revisando la actualización de la promoción de publicidad y 
diseño distintivo, incluyendo el nombre, del programa.

Se discutió la eliminación de la palabra "ciego" del nombre del 
programa, pero el liderazgo de la biblioteca

articuló efectivamente el significado de la palabra y la

importancia de la creencia subyacente en las personas ciegas, la principal

audiencia de la biblioteca. ¿Por qué la biblioteca nacional, a 
diferencia de otras agencias del

campo de la ceguera, sigue comprometida con el uso de la palabra C? El 
Servicio Nacional

de Bibliotecas para Ciegos y Personas con Discapacidad de Impresión

está dirigido por una mujer ciega, Karen

Keninger, quien cree profundamente en la capacidad y el valor de las 
personas ciegas.

La biblioteca, como nuestro movimiento, reconoce que la palabra "ciego" 
es un

atributo positivo.

Como clase de personas ciegas, todos enfrentamos barreras artificiales y 
bajas

expectativas en la sociedad. Ya sea con poco contraste de color, o sin 
etiquetar

controles interactivos. La falta de incorporación de la accesibilidad en 
el desarrollo de la web

nos afecta a todos. Cuando buscamos empleo, todos estamos frenados

por las bajas expectativas. Cuando buscamos votar en las elecciones, 
obtenemos

igualdad de acceso cuando demostramos que todos hemos sido privados de

nuestros derechos. Usamos la palabra "ciego" porque rechazamos la obsoleta

Noción de que la ceguera es una tragedia que limita las posibilidades. 
Para nosotros,

la palabra "ciego" tiene poder y significado. Para aquellos que están 
centrados en la vista,

"ciego" evoca miedo e incertidumbre. El lenguaje refleja creencias, y

no venderemos nuestras creencias. Nosotros, los ciegos, seguimos 
nuestras palabras con la acción

de vivir la vida que queremos. El resultado de nuestra perseverancia y 
la acción colectiva

es la destrucción del antiguo significado de ciego y la creación de un 
nuevo,

significado más fuerte y auténtico.

En contraste, muchos profesionales en el campo enfatizan palabras que

se centran en la vista. Detrás de sus palabras hay creencias que nos 
frenan. Algunos

profesionales creen verdaderamente que las palabras simplemente no 
importan. Otros

profesionales creen sinceramente que, por el bien de sus clientes,

solo deben usar las palabras políticamente correctas.

Rechazamos estas dañinas

afirmaciones porque sabemos que las palabras importan, que las palabras 
son impulsadas por

creencias, y que las palabras crean vibraciones que conducen a acciones que

ayudan o hieren nuestra marcha hacia la libertad. Ahora es el momento de 
una revolución

de palabras en el campo de la ceguera. Ahora es el momento de que los ciegos

avancemos nuestro lenguaje de la libertad.

Considere

la Association for Education and Rehabilitation of the Blind and 
Visually Impaired

(AERBVI). La asociación se describe a sí misma como "una

organización de membresía profesional dedicada exclusivamente a 
profesionales

que brindan servicios a personas con pérdida de la vista". Aunque no 
protestamos

la existencia de una organización de membresía para profesionales en el 
campo,

denunciamos su uso continuado de un lenguaje centrado en la vista que

enfatiza su separación del patrón de pensamiento encontrado en el

movimiento organizado de ciegos.

El sitio web de AERBVI cuenta con una página que promueve oportunidades 
para trabajar en el campo

que se titula de manera prominente, "Conviértase en un profesional de la 
visión".

Desde la primera impresión, la asociación deja en claro cómo les 
gustaría que

pensemos en el campo. La visión está en el centro.

Escuche por usted mismo; he aquí

el párrafo de apertura de esa página: "Los profesionales de la visión tienen

oportunidad de hacer cambios positivos en la vida de otra persona. Hay una

variedad de profesiones en la comunidad de la visión, varios tipos 
diferentes

de entornos laborales y opciones laborales.

Los profesionales de la visión trabajan

con organizaciones públicas o privadas, con niños y adultos, y con

profesionales de la educación, la medicina y la rehabilitación". La página

destaca las opciones de carrera como profesor de los estudiantes con 
deficiencias

visuales, que los profesionales a menudo acortan a simplemente profesor 
de la visión, o terapeuta de rehabilitación visual, que, según la página,

es el término moderno para profesor de rehabilitación. ¿Qué creencias 
subyacen a los

títulos de, profesores de la visión y terapeutas visuales?

El lenguaje de la vista utilizado por AERBVI eejemplifica una

desconección fundamental entre algunos profesionales en el campo de la 
ceguera que

continúa frenándonos como personas ciegas. Es un problema sistémico que

se remonta a antes de la fundación de la Federación Nacional de Ciegos.

Es una parcialidad que impulsó a nuestros primeros líderes a establecer 
este movimiento en

1940. La filosofía centrada en la vista y su lenguaje de ver perpetúan

la falsa noción de que las personas ciegas necesitan ser aconsejadas por 
terapeutas para

operar en un mundo visual, con todas las limitaciones que se supone ser, 
inherentes a no poder ver. De esto han venido las acciones de

crear un sistema profesional que capacite a los profesionales de la 
visión, a fin de ayudar

a aquellos con discapacidad visual a obtener ganancias óptimas basadas 
en primer lugar, y sobre todo,

en la vista.

Sin embargo, se nos sigue diciendo que las palabras no

importan y que las diferencias de perspectiva están en el pasado. 
Nosotros, los

ciegos, sabemos que las palabras sí importan, y tenemos la intención de 
seguir nuestro lenguaje

de libertad con acciones para hacer cambios.

Esta noche, hacemos un llamado a todos los profesionales en el campo 
para que cambien su

lenguaje para reflejar las creencias que queremos encontrar en nuestro 
campo. A los profesionales de rehabilitación, y a los profesionales de 
la educación, los alentamos

a unirse al liderazgo de nuestras divisiones en el uso del idioma de la 
libertad cultivado por el movimiento organizado de los ciegos sobre la 
ceguera. Nosotros no somos deficientes.

No necesitamos terapia para nuestros ojos. Apreciamos que no toda

la ceguera es la misma, pero nuestra experiencia nos dice que todas las 
personas que viven

con ceguera, como decimos, las personas ciegas, enfrentan el mismo 
conjunto de bajas

expectativas en la sociedad que requieren acción. Tome una decisión 
consciente de

usar nuestro lenguaje de la libertad, porque le hará evaluar sus propias

creencias. Esta conciencia le permitirá continuar el proceso de

Cultivar su filosofía sobre la ceguera centrada en la experiencia de lo 
vivido por los ciegos en lugar de en la jerarquía de ver. Si emprende 
esta exploración de la comprensión dentro del movimiento de los ciegos 
organizados, sabemos que podrá realizar cambios positivos en

el mundo que creemos sinceramente que busca.

El cambio comienza con cada uno de nosotros y, como personas ciegas, 
podemos hacerlo mejor

al influir en los profesionales y el público en general cuando usamos 
constantemente

el lenguaje de la libertad que refleja nuestras creencias compartidas.

No podemos permitirnos

aceptar las palabras con las que la sociedad se siente más cómoda 
envolviéndonos. No debemos ceder a la idea de que las palabras no 
importan. Oigo con frecuencia a personas ciegas que reflejan el lenguaje 
de la vista que es

utilizado en la sociedad en lugar de lo que es auténtico para nosotros. 
Los materiales de Braille e inprenta pueden ser solo eso, en lugar de 
especiales y normales. ¿Cuantas veces

Le han preguntado si desea el menú normal (es decir, en inprenta) o la

copia especial? ¿Usted respondió con el idioma de ver o el idioma de

libertad? ¿Cuántas veces ha escuchado a personas ciegas referirse a los 
"profesores de la visión"?

Cuando he preguntado a mis amigos ciegos por qué usan este término,

a veces me dicen que están siguiendo el ejemplo de los

Profesionales. Sin embargo, esas mismas personas ciegas se sienten 
frustradas con las bajas

expectativas para las personas ciegas dentro del sistema educativo, 
especialmente cuando

se trata de alfabetización en Braille. Si queremos asegurar el futuro 
que deseamos,

Debemos renovar nuestro compromiso con nuestro lenguaje de la libertad.

En 1993, aprobamos un proyecto de ley en nuestra convención, rechazando 
políticamente lenguaje correcto sobre la ceguera que declaraba:

"Creemos que es respetable ser ciego,

y aunque no nos enorgullecemos del

hecho de nuestra ceguera, tampoco tenemos ninguna vergüenza en ella. En 
la medida

que se utilicen eufemismos para transmitir cualquier otro concepto o 
imagen, deploramos

tal uso".

En ese momento, casi todos en la comunidad de discapacitados

nos criticó por esta posición. Hemos mantenido consistentemente el

lenguaje de la libertad alineado con nuestras altas expectativas basadas 
en nuestras

creencias compartidas.

Avancen rápido hasta el día de hoy, donde la comunidad de discapacitados ha

adoptado ampliamente nuestra perspectiva, que se conoce ampliamente como 
identidad

de primer idioma. Les planteo esto no para demostrar que teníamos razón,

sino más bien, para señalar que ahora tenemos que esforzarnos más. No es 
suficiente para

los profesionales de nuestro propio campo decir:

"Lo llamaremos ciego si prefiere eso". Necesitamos que tengan una 
comprensión real de por qué es

importante. Eso comienza usando nuestro lenguaje de libertad en lugar de

conformarnos con lo que requiere la población no ciega.

Continuamos fortaleciendo nuestro propio entendimiento cuando estamos

intencionalmente sobre las palabras que elegimos. Cuando todavía era 
relativamente nuevo en

la filosofía de la Federación, escuché a alguien usar el término "guía 
humano". En ese momento, solo clasifiqué a los guías como de dos 
variedades: perros guías,

y guías videntes. El término guía humano me obligó a examinar mis

creencias y su coherencia con nuestra filosofía compartida. Como una 
persona ciega, he guiado a muchas personas, tanto ciegas como videntes, 
y la vista

no se requiere ni se utiliza en mi forma de guíar. Me di cuenta de que mis

clasificaciones estaban arraigadas en la filosofía centrada en la vista,

no en mi auténtica experiencia como persona ciega. Una vez que mi 
conciencia se elevó,

Comencé a usar palabras que fortalecían y reflejaban nuestras creencias 
compartidas.

Sin embargo, debemos tener cuidado de no conformarnos simplemente con 
usar y escuchar

las palabras correctas. Las creencias y acciones consistentes también 
son fundamentales para

lograr nuestro destino.

Aprender a hablar el idioma de la libertad para ciegos no es suficiente.

En última instancia, si las creencias no son consistentes con las palabras,

la acción o la falta de acción expondrá la verdad. Muchas agencias para 
ciegos usan palabras

como la independencia, la autosuficiencia y el vivir la vida al máximo. 
Sin embargo,

sus acciones evitan que las personas ciegas logren esa realidad. Consideren

el hecho de que la Federación Nacional de Ciegos haya eliminado en gran 
medida

la práctica de pagar salarios por debajo del salario mínimo a las 
personas ciegas en programas en

agencias para ciegos. Tras décadas de resistencia, las agencias disfrutan

diciéndonos que ya no usan la exención 14(c) bajo

la Ley Laboral de Normas Justas,

Fair Labor Standards Act. Sin embargo, ¿esas mismas agencias no brindan 
a los trabajadores ciegos

Pago comparable al de las personas no ciegas que realizan el mismo trabajo

con pagos por desempleo cuando ocurren despidos, y con capacitación que 
conduce a

oportunidades de movilidad ascendente dentro de la organización. ¿Con 
que frecuencia esas mismas agencias dan a sus empleados ciegos recibos 
de pago, salud y materiales de seguridad y comunicaciones 
organizacionales en un formato totalmente accesible?

¿Con que frecuencia ofrecen sitios web accesibles, proporcionan 
descripciones accesibles

de sus fotos en las redes sociales, y se niegan a comprar tecnologías si

no son accesibles para personas ciegas? Para la mayoría de las agencias, 
sabemos que

las respuestas a estas preguntas, y otras que podríamos considerar plantear,

Reflejan expectativas bajas inconsistentes con las palabras de aliento 
que usan.

De hecho, esas bonitas palabras se utilizan para cortejar a los donantes 
a quienes se les da a creer

que hay una acción real detrás de las palabras.

También sabemos que las respuestas son

inconsistentes con la comprensión de la ceguera que tenemos en la 
Federación Nacional de Ciegos.

Uno de los factores importantes que contribuyen a las acciones 
arraigadas en las bajas

expectativas es la falta de miembros ciegos en la junta de directores y 
ejecutivos ciegos en

agencias para ciegos. Mientras que los ejecutivos no ciegos pueden 
internalizar

comprensión de la ceguera que compartimos en este movimiento, el hecho 
sigue siendo

que la grave falta de representación adecuada de las personas ciegas en

posiciones de liderazgo resulta directamente en poca responsabilidad y 
grandes

inconsistencias en las creencias, en las palabras y acciones de las 
agencias para ciegos.

Tomemos, por ejemplo, a Bryan Bashin, una persona ciega que se desempeña 
como jefe

director ejecutivo de San Francisco LightHouse for the Blind. Un miembro 
por largo tiempo de nuestro movimiento, Bryan habló en nuestra 
convención el año pasado sobre

sus esfuerzos por aportar mayor autenticidad al trabajo de su agencia. Bryan

y yo, hablamos con frecuencia de los desafíos de intentar trabajar con 
agencias

y ejecutivos cuyas acciones perpetúan bajas expectativas. Tal vez usted 
pueda

relacionarse con uno de los muchos relatos que Bryan ha compartido 
conmigo. Hace varios años, en una reunión de directores de agencias de 
la ceguera, Bryan fue la única

persona ciega en un grupo de líderes que se aventuraron a compartir la cena

juntos.

Durante su caminata hacia el restaurante, comenzó a llover y

Bryan, que era un viajero experimentado, empezó a ponerse el 
impermeable. Un director no ciego de la agencia para personas ciegas se 
acercó rápidamente y, sin previo aviso, comenzó a ayudar

a Bryan.

Este acto de servicio público incluyó agarrar las cuerdas de la capucha

del abrigo ajustándolas para asegurarse de que la capucha no se suelte.

En las propias palabras de Bryan para mí, "Sabes, como ejecutivos 
estamos preparados para

peleas presupuestarias de millones de dólares, problemas de Recursos 
Humanos y cobertura de prensa de última hora.

Pero nada lo prepara a uno para la impactante comprensión de que un 
colega, director ejecutivo,

pensó que yo necesitaba ayuda para atarme la capucha de la chaqueta, y 
mucho menos la

Invasión personal no anticipada de "ayudar" tocando la ropa sin siquiera 
preguntar. El profundo simbolismo del buen director ejecutivo que es tan

ajeno al paternalismo inherente a su ayuda espontánea. Esto simboliza

el trabajo que tenemos que hacer con agencias tan alejadas de las 
personas a las que sirven

que ni siquiera piensan en la naturaleza infantilizante de su

comportamiento."

En ese momento, si Bryan se hubiera rebelado con demasiada fuerza contra 
esta

acción inapropiada, sin duda habría sido etiquetado como teniendo una 
actitud en su forma de pensar, o más probablemente, como "uno de esos 
militantes." Más asombroso

es el hecho de que ninguno de los otros ejecutivos de agencias no ciegos 
dijo una palabra

sobre lo inapropiado del incidente. Posiblemente ni siquiera

encontraron algo malo en la situación.

El cambio comienza con cada uno de nosotros aquí esta noche. Como 
personas ciegas, podemos

elevar mejor las expectativas de las agencias y del público en general 
cuando

usamos conscientemente el lenguaje de la libertad que refleja nuestras 
creencias compartidas

y cuando seguimos esas palabras con acciones consistentes. Cuanto más 
fuerte sea la

relación de nuestras creencias, palabras y acciones, mayor es la influencia

de las vibraciones que creamos en la sociedad, y más poderosos son 
nuestros hábitos y

valores.

Cuando unificamos nuestras contribuciones individuales en un movimiento de

acción colectiva, determinamos la forma de nuestro propio destino.

Cuando los jóvenes ciegos vienen a los programas educativos de nuestra 
Federación,

a menudo usan las palabras adecuadas. Nos dicen que pueden hacer 
cualquier cosa, y

quieren igualdad de trato. Sin embargo, cuando se les preguntó cómo 
hacen ciertas cosas,

Con frecuencia encontramos que ninguna acción sigue a las palabras. Como 
resultado,

hemos creado nuestros programas de la Federación para que se centren en 
las oportunidades a fin de que las personas ciegas

realicen las acciones en sí mismas,

de acuerdo con las creencias y palabras que

compartimos.

Antes de conocer a la Federación Nacional de Ciegos, yo también dije esas

palabras pero no realicé las acciones. Fui incapaz de actuar porque,

en el fondo, las creencias que tenía no eran de igualdad y oportunidad,

sino más bien disparidad y anonimato. Encontrar mentores ciegos en la 
Federación Nacional de Ciegos, recibiendo orientación para evaluar mis 
propias creencias,

y ser desafiado a actuar marcó la diferencia. Ellos me enseñaron

que yo podía dirigir mi propio futuro, y compartieron conmigo todo lo que

sabían sobre vivir la vida como una persona ciega. Encontré que mi 
destino era

arraigado y limitado por mis propios conceptos equivocados sobre la ceguera.

Mi familia de la Federación me iluminó en que creer por sí solo no es 
suficiente.

Las palabras dan poder a las creencias y las acciones crean la 
realización de

esas creencias. Al mismo tiempo, cuando actuamos de acuerdo con nuestras 
palabras, fortalecemos

nuestras creencias. Sin embargo, no comprendí realmente el poder de 
autodirigir las

conexiones entre creencias, palabras y acciones hasta que me comprometí

contribuyendo a la labor de la Federación Nacional de Ciegos. Sólo cuando

Comencé a compartir libremente mi comprensión con otras personas ciegas,

y participando activamente en nuestra misión compartida, realmente 
desarrollé los hábitos

y valores requeridos para cumplir mi destino o, para decirlo en palabras de

la Federación de hoy, para vivir la vida que quiero.

Lo que el Doctor tenBroek entendió durante su tiempo como nuestro primer 
líder; Lo que

Kenneth Jernigan, nuestro segundo gran presidente, demostró creando

programas efectivos; lo que el Doctor Marc Maurer, nuestro presidente 
con más años de servicio,

nos enseñó a sentir en nuestro corazón;

y lo que hemos confirmado a través de

reunirnos año tras año, es que cuando las creencias, palabras y acciones de

muchos se sintetizan y aplican en la misma dirección, las vibraciones son

Imparables. Con ochenta años de experiencia, ahora no tenemos ninguna 
duda de que la

comunidad de acción que hemos creado en este movimiento es la más 
poderosa fuerza

para generar expectativas para los ciegos.

También sabemos que lo haremos

solo si mantenemos ese poder y si continuamos aplicando nuestros 
corazones, mentes, voces,

y manos a la obra a las acciones que harán avanzar nuestra organización. 
Esta voluntad

requiere que cada uno de nosotros individualmente alineemos 
conscientemente nuestras creencias, palabras,

y acciones.

También requerirá que volvamos a comprometernos con el vínculo de

la fé que compartimos al trabajar juntos hacia nuestro destino. No 
podemos esperar que

los terapeutas de la visión lo hagan por nosotros.

No podemos esperar que otros definan

nuestro futuro. No podemos conformarnos solo con las palabras adecuadas. 
Debemos exigir

acción, y comienza con cada uno de nosotros en este movimiento.

Volvamos a comprometernos con las acciones que sean coherentes con nuestras

creencias y palabras. No basta con decir que queremos respeto en la 
sociedad. Nosotros

debemos tomar las acciones que demuestren respeto por los demás. Debemos 
tomar

nuestras responsabilidades, así como esperar nuestra igualdad de derechos.

No basta con decir que queremos una participación plena. Debemos tomar

acciones para demostrar cómo las barreras artificiales de la sociedad 
nos frenan.

Debemos enseñar a las corporaciones que crean tecnología inaccesible cómo

cambiar su forma de ser. Debemos responsabilizar a las agencias de los 
ciegos donde

las palabras suenan bien, pero las creencias y acciones son incorrectas. 
No debemos

conformarnos con el progreso que hemos logrado, sino que continuar 
expandiendo

oportunidades de participación plena en la sociedad.

No es suficiente decir que tenemos la valentía de seguir el resto del 
camino en nuestro camino hacia la libertad. Debemos enfrentarnos a la 
adversidad, hacer

sacrificios y apoyar a los miembros de la familia de nuestra Federación 
que se pusieron en

la línea como ejemplos para lograr la igualdad para todos.

No basta con decir que valoramos la acción colectiva. Debemos continuar

dando la bienvenida a todas las personas ciegas a nuestro movimiento, 
enseñarles nuestro

comprender y sintetizar sus perspectivas en nuestra filosofía y

trabajo. Debemos buscar nuevas formas de ampliar la gama de 
participación activa de una diversidad

de personas ciegas en nuestro movimiento. Debemos hacerlo sin dejar alguna

persona ciega atrás.

No basta con decir que valoramos la democracia. Debemos entrenar activamente

a líderes que estén preparados para llevar a cabo las expectativas de 
nuestro código de conducta compartido, y representar la voluntad expresa 
de nuestros miembros. Debemos

Continuar con nuestro compromiso de explorar preguntas desafiantes y 
convertirlas

discusiones en acciones para el cambio dentro y fuera de nuestro 
movimiento. debemos continuar eligiendo un grupo diverso de personas 
ciegas para liderar esta

organización que refleja nuestros valores, y debemos encontrar formas de 
hayar personas ciegas

que comparten nuestra filosofía para ser elegidas a cargos públicos. 
Debemos tomar

acciones necesarias para exigir que las agencias para ciegos sean 
guiadas por

opiniones sustanciales de las personas ciegas en sus estructuras de 
gobierno, y

debemos desalentar el apoyo a las agencias donde sus palabras no son

coherentes con sus creencias y acciones.

No basta con decir que somos la familia de la Federación y que ponemos

amor en nuestro movimiento. Nuestras acciones deben continuar 
demostrando la creencia

detrás de las palabras. Este movimiento se ha hecho conocido por su 
generosidad, su

calidez y su capacidad para cambiar vidas a través de conexiones 
personales. Eso

es porque no solo hemos usado las palabras familia y amor, sino que 
también las hemos seguido

con acciones significativas.

Durante este último año, hemos experimentado lo mejor de lo que queremos 
decir

cuando usamos las palabras familia y amor. Hemos abierto las puertas de

Este movimiento; nos hemos acercado y hemos apoyado a las personas 
ciegas que más necesitaban asistencia durante una pandemia mundial; 
hemos respondido con fuerza

donde nuestros derechos han sido ignorados; hemos respondido con amor y

solidaridad a las personas ciegas que se enfrentan a la injusticia 
sistémica debido a sus

características que se cruzan; hemos dedicado cientos de horas extra y

miles de dólares inesperados; y hemos innovado nuevos programas para

atender las necesidades más urgentes. Algunos pueden decir que hicimos 
estas cosas porque

los tiempos lo exigieron. Los miembros de la Federación conocen la 
verdad. Hicimos

estas cosas y más porque creemos en las personas ciegas, creemos que

la ceguera no es la característica que determina nuestro futuro, decimos 
lo que

creemos, y sabemos que las palabras no significan nada sin acción.

Permaneceremos plenamente comprometidos a tomar todas las acciones 
audaces necesarias para lograr

el resto del camino a la libertad. Las acciones de esta Federación están 
impulsadas por

amor, y el amor es la fé mutua de uno con otro que impulsa las acciones que

cumplirán nuestro destino.

Si bien, no podemos estar todos en el mismo lugar al mismo tiempo para 
celebrar

nuestro progreso, sentimos el amor, la esperanza y la determinación que 
viene de

lo que compartimos en este movimiento. Más que palabras, compartimos las 
acciones de

la libertad. Más que palabras, compartimos acciones de igualdad. Más que

palabras, compartimos las acciones de la independencia. Más que 
palabras, compartimos el

vínculo de familia. Más que palabras, compartimos la determinación de ir 
el resto

del camino a nuestro destino.

Mi familia de la Federación, en ochenta años hemos llegado más lejos de 
lo que nuestros

miembros fundadores podrían haberlo imaginado, y aún no hemos terminado. 
Al principio, todo lo que teníamos eran las palabras para expresar 
nuestras esperanzas y sueños.

Hoy, tenemos las creencias, las palabras y las acciones necesarias para 
hacer todo lo posible

en el camino a nuestro destino. La filosofía centrada en la vista no 
puede detenernos. Las agencias de ceguera con los buenos materiales de 
mercadeo que reflejan

las creencias y acciones equivocadas no pueden detenernos. Los gobiernos 
y corporaciones que

esperan que esperemos la accesibilidad no pueden detenernos. Los 
críticos que no logran

creer en nuestra comprensión auténtica de la ceguera no pueden 
detenernos. Nada

nos detendrá mientras sigamos asumiendo la responsabilidad de hablar

actuando por nosotros mismos. Nada nos detendrá mientras sigamos 
abrazándonos

apretados al vínculo de la fé que compartimos. Nada nos detendrá mientras

nos comprometemos con los hábitos y valores necesarios para cumplir 
nuestro destino.

Somos los ciegos, unidos en acción, conectados por nuestro amor mutuo,

y motivados por el futuro que pretendemos crear. Si bien, podemos estar 
temporalmente

distanciados unos de otros, nunca estaremos divididos. Construyamos como 
movimiento.

Hablemos con una sola voz. Actuemos con un solo corazón. Construyamos

la Federación Nacional de Ciegos.



More information about the NFBEspanol-Talk mailing list